Reflexiones desde el alma de un inmigrante

No me lo dijeron a mí. No fue personal. Y, sin embargo… dolió.

Duele cuando lees comentarios que generalizan, que estigmatizan, que reducen a “los inmigrantes” a un prejuicio o a una amenaza.

Duele aunque sepas que no te conocen.
Duele aunque vos estés haciendo las cosas bien, aunque estés construyendo una nueva vida con esfuerzo, respeto y amor.

Duele porque ser inmigrante no es solo cambiar de país. Es también cambiar la forma en la que el mundo te mira… y a veces, cambiar la forma en la que uno mismo se ve. 

El peso invisible del prejuicio

Ser inmigrante no debería definirnos por debajo.Y sin embargo, muchas veces lo hace. No por lo que somos, sino por lo que otros creen que somos. 

Nos ven como números, estereotipos, amenazas o abusos al sistema.
Y se olvidan de algo esencial: detrás de cada persona que emigra hay una historia, una necesidad, una valentía enorme.

¿Cómo no va a doler, si sabemos lo que cuesta?, ¿Cómo no va a doler, si sabemos lo que implica dejar una tierra que amas, una familia que extrañás, una identidad que se vuelve difusa al mezclarse con otra cultura?, ¿Cómo no va a doler, si cada vez que alguien dice “acá vienen a aprovecharse” sentimos que esa frase borra todo lo que hacemos, todo lo que dimos, todo lo que dejamos atrás?

Y, sin embargo, seguimos.
Seguimos construyendo.
Seguimos aprendiendo.
Seguimos aportando.

Almas sin fronteras: un espacio para sanar, pertenecer y florecer

De este sentir, de este dolor transformado en propósito, nació Almas sin fronteras.
Un espacio para quienes han tenido que rehacerse lejos de casa, pero no quieren perder su esencia.

Un rincón donde podés llorar tu nostalgia y al mismo tiempo celebrar tu valentía.

Creemos que emigrar no te quita identidad. Te da la posibilidad de redescubrirla, de ampliarla, de integrarla con lo nuevo.
Creemos que no sos “menos” por venir de otro lado. Sos más: porque trajiste tus raíces, tu historia, tus luchas y tu luz.

Si alguna vez te dolió lo que dijeron de “los inmigrantes”… este rincón también es para vos.

Este blog, esta comunidad, esta idea de un mundo sin fronteras del alma, está hecha para acompañarte, para recordarte que no estás solo/a, qe hay muchas personas como vos, reinventándose, sanando, creciendo, y que el valor de una persona nunca se mide por el lugar donde nació, se mide por su capacidad de amar, resistir y construir en cualquier tierra donde le toque sembrar.

¿Querés ser parte de esta comunidad?
Podés seguirnos en redes, compartir tus experiencias, comentar o simplemente leer en silencio, sabiendo que este espacio también te pertenece.

Bienvenido/a a tu rincón sin fronteras.
Te estábamos esperando.

—Adrián & Paula

Fundadores de Almas sin fronteras.